Fresado Básico

El calor generado durante el maquinado se debe al impacto del filo de corte con la pieza y a la fricción de las virutas a través del filo de corte del inserto. Generalmente se elimina con las virutas hasta un 80% del calor generado durante el proceso de maquinado. El 20% queda en el filo de corte.

 

El calor generado durante el maquinado ablanda el filo de corte y acelera el desgate de la herramienta o causa la alteración dimensional del maquinado debido a la expansión térmica. Mediante la aplicación del refrigerante evita la acumulación de calor en la herramienta y en la pieza por los efectos de enfriamiento. Esto contribuye a prolongar la vida útil de la herramienta y a mantener la precisión del maquinado.

 

Para pequeños cortes y paredes grandes están propensos a deformarse debido al calentamiento, aveces se realiza el maquinado en un tanque lleno de refrigerante.

El refrigerante penetra y se filtra dentro de las caras entre la cara de corte , el flanco y la pieza. Esta acción permite el enfriamiento y la lubricación. Otra área donde penetra el refrigerante es dentro del plano de desprendimiento de las virutas acelera y mejora la maquinabilidad. Esto puede observarse especialmente durante el maquinado de  aleaciones de aluminio.

Mediante la lubricación, las virutas producidas se deslizan suavemente a través de la cara de corte, pueden eliminarse los problemas como la formación de material en el filo y la soldadura además de prolongar la vida útil de la herramienta.

 

Adicionalmente, también puede estabilizarse la precisión dimensional de la parte maquinada. Mediante la aplicación del refrigerante se forma la película de lubricante entre las virutas y la cara de corte. Está película permite que las virutas se deslicen fácilmente a través del la cara de corte, protegiendo al filo de corte.